Los agujeros negros son un concepto astronómico que muchos han escuchado. Películas como Interstellar han intentado retratarlos, y el mediático Stephen Hawking ha publicado varios libros sobre ellos. Sin embargo, un agujero negro nunca ha sido observado directamente. La primera evidencia observacional de la existencia de los agujeros negros llegó el año pasado, gracias al proyecto LIGO y sus detecciones de ondas gravitacionales.
Pero esta semana, un proyecto astronómico nunca antes visto buscará observar directamente el agujero negro supermasivo más cercano a nosotros: Sagitario A*, ubicado en el centro de nuestra galaxia. Para esto no se puede utilizar un telescopio normal, por lo que el proyecto Event Horizon Telescope combinará distintos radiotelescopios en todo el mundo para crear el equivalente de un solo gran telescopio, del tamaño de nuestro planeta.